soy distinta... sigo siendo la misma...

Un día dejé de lado la mediocridad de mi vida para ser lo que tanto quise y terminé siendo lo que nunca deseé: Una mujer cursi y sonriente que le gusta acariciar noches iluminadas de estrellas, sintiendo un cúmulo de sensaciones a la orilla del abismo del placer. Dejé de lado cosas banales para vivir sin temblores que asustaran mi interior y aniquilaran mi exterior. creo ser real, vivo en un mundo, donde aprendi a tocar con la yema de los dedos, me enseñaron que el mundo puede ser mío y que con una sonrisa puedo moverlo. He vuelto a creer que es mío en un universo utópico. Al final del tiempo sigo siendo la Misma, el Alter Ego de lo que soy pero que no quise ser.